Los bailes de carnaval y los bailes cantados representan tradiciones familiares ya establecidas que recuentan sucesos históricos y culturales de relevancia regional. Durante las celebraciones cívicas o religiosas, los bailadores, enmascarados y luciendo vistosos disfraces, actúan historias sobre temas controversiales tales como la esclavitud y el abuso de las mujeres de descendencia africana durante la época colonial.
En Colombia, el carnaval está identificado con la ciudad de Barranquilla en la costa del Caribe, pero la celebración más antigua es de Mompox, uno de los puertos del río Magdalena de mayor actividad mercantil durante la época colonial. Mompox es la sede del grupo de música y baile Don Abundio y sus Traviesos. Samuel Mármol, conocido como Don Abundio, es a la vez director y músico, bailador y artesano de disfraces. Don Abundio dice con gran orgullo: “He heredado estos bailes de mis antepasados y ahora mi familia también es heredera.” Su mayor celebración es el Carnaval de Barranquilla. Todos los años este festival atrae cientos de miles de visitantes de todo el país y del resto del mundo. Brinda oportunidad a Don Abundio y sus Traviesos para desplegar todo lo que han preparado durante el año anterior y para presentar el espíritu de Mompox ante un público más extenso.
La época del carnaval es oportunidad para reunir a todo el pueblo. Es una celebración que permite que uno sea lo quiera. Las mujeres se visten de hombre, la gente se transforma vistiéndose de animales, los pobres se convierten en ricos y todos celebran juntos. Entre los bailes y los bailes cantados favoritos de Don Abundio están “El baile de los coyongos”, “Las pilanderas”, “El son del negro” y “La cacería del tigre”. Cada uno de estos bailes utiliza distintivos disfraces y se acompaña con los ritmos animados de los tambores, las flautas de millo, las gaitas y ocasionalmente el acordeón.
El baile de los coyongos
Don Abundio describe El baile de los coyongos: “Hoy queremos presentarles ‘El baile de los coyongos’ para que puedan apreciar como la humanidad ha destruido esta bella especie de pájaros. Es una tradición de la Depresión Momposina. El baile se presenta en los carnavales de Mompox. Les describo nuestro disfraz. Cada coyongo representa un pájaro. Los versos que acompañan este baile describen como el cazador mataba los coyongos, pero no queremos exterminar la especies.” De acuerdo a Don Abundio, la mejor forma de comunicar el mensaje del baile – la preservación de la especies para que los habitantes del área los puedan disfrutar en el futuro – es convertirse en el pájaro. Los disfraces para “El baile de los coyongos” son fabricados sobre armazones de hierro cubiertos con tela y con un pico de madera. Las coberturas de tela tienen mangas muy largas simulando las alas de los pájaros en vuelo. Los otros personajes en el baile son el cazador y el tiburón.
La característica principal del disfraz es el pico de madera, que también sirve como instrumento musical. Don Abundio construye los picos de guácimo, una madera proveniente de las riberas del área. Utiliza materiales del ambiente local para comunicar un mensaje de protección del ambiente y las especies nativas.
Las pilanderas
La danza de “Las pilanderas” representa la tradición del chisme de las mujeres mientras trabajan moliendo el maíz. La imagen central es la del pilón, el mortero de madera, utilizado en muchas comunidades afro colombianas para moler el maíz para uso en especialidades como las arepas, la mazamorra, la chicha y los bollos. Sin embargo, el baile aprovecha esta escena doméstica para comentar y burlarse de la sociedad colonial tanto como de la actual. Las pilanderas son representadas por hombres luciendo vestidos y parasoles de la moda acostumbrada por las damas de sociedad en tiempos de la colonia. El “chisme” en la letra de las canciones incorpora comentarios y opiniones sobre situaciones sociales contemporáneas.
El son del negro
“El son del negro” también es un baile para expresar quejas y agravios, solo que los personajes representan personas de descendencia africana quienes se burlan y critican a los españoles que les oprimieron en la época de la colonia española. Don Abundio explica que su crítica se enfoca sobre las mujeres españolas a quienes imitan exageradamente en sus bailes de estilo europeo. Los personajes principales son la mujer española, la ninfa y los bailadores africanos. Con Don Abundio y sus Traviesos, la mujer española es generalmente actuada por Dania Felizolla, una de las integrantes del grupo. La ninfa es un hombre vestido de mujer y los demás usan vestimenta de bailadores africanos.
Para este baile los bailadores usan sombreros ornamentados y pantalones negros combinados con rojo, amarillo y verde. Como es un baile de los descendientes de africanos, Don Abundio y sus Traviesos usan carbón vegetal mezclado con agua para elaborar una pintura que aplican a su piel para oscurecerla. También aplican un tinte vegetal rojo a sus lenguas para exagerar el contraste con su piel oscura. Por último se pintan los labios de rojo muy brillante para tomar un aspecto más femenino y burlarse de las mujeres españolas.
La cacería del tigre
El último baile, “La cacería del tigre”, así como “El son del negro”, también se basa en las tradiciones africanas. Representa una época en la que los descendientes de africanos ya habían sido liberados de la esclavitud pero todavía eran gobernados y oprimidos por los españoles. Las personas liberadas de la esclavitud pasaron a trabajar para los hacendados españoles quienes les requerían cazar los tigres que amenazaban su ganado y sus tierras. Mientras cazaban componían canciones para pasar el tiempo. El baile ilustra uno de esos cantos. Un bailador representa al tigre y a los demás son cazadores. Llevan en sus manos accesorios simulando los machetes que se usan para cortar la maleza en búsqueda de los tigres.
Las máscaras y accesorios son los elementos principales de los disfraces de los bailadores. Un bailador usa una máscara de tigre fabricada de papier-maché por Don Abundio. Los machetes de los otros bailadores también son de papier-mâché.
